Grandes expectativas había en el spin-off del “Conjuro” (2013) Dir. James Wan, referente a la muñeca demoniaca llamada Annabelle. Y ¿Cómo no? Si algunas de las escenas más pavorosas del filme son cuando aparece la figura de madera con aspecto humano. Y aunque Annabelle le fue muy bien en taquilla en su estreno en 2014, además de ser seguida por la usual campana publicitaria y el apoyo viral en redes, fue una gran decepción para los fans del género y de las producciones de James Wan.
Aburrida, lenta, con diálogos elementales, largos y vacíos, entre otros elementos desafortunados, hacen a la experiencia de ver Annabelle como nugatoria. Detalles como el anacronismo en el vestuario y peinado de los personajes además de descalificar su producción, también hacen difícil encontrar la cercanía que existe con el “Conjuro”. Esta pieza cinematografía se nota distante del nivel narrativo y de edición del filme del cual se nutre.
La historia comienza en los 70’s cuando John Gordon adquiere una nueva muñeca para la colección de su esposa Mia, dentro de la vísperas de la llegada de su primer bebé. Sin embargo su felicidad idílica se ve afectada por un incidente violento con tintes satánicos ocurrido cerca de su casa, el cual desventuradamente afecta su hogar y sobre todo a su nueva adquisición coleccionable.
Las historias sobre muñecos poseídos se sostienen en presagios, los cuales pueden ser divididos en dos vertientes (como casi todas las historias de monstruos según Sthepen Asma en el libro “The Ashgate Encyclopedia of Literary and Cinematic Monsters” de Jeffrey Andrew Weinstock ). Por un lado se convierten en juicio divino sobre algo inquietante y amenazante en el universo que se habita; ya sea una mala acción o una lección moral sobre los peligros de la maldad. Y en otro caso podrían ser un accidente de la naturaleza, el cual revela no la voluntad de los dioses sino la ausencia de un plan divino. En otras palabras las limitaciones de la vida humana comparada con lo sobrenatural.
Dentro de la línea de películas donde el muñeco poseído es un aleccionador e imparte justicia, estaría el magnífico episodio de “La dimensión desconocida” de 1964 llamado “The Living Doll”, primer referente a este subgénero del horror, donde una muñeca de manera siniestra imparte su concepto de justicia en una familia americana. “Dolls” (1987) Dir.Stuart Gordon al igual que su precedente es un cuento de hadas oscuro, en donde un centenar de muñecas someten a adultos irresponsables y padres poco amorosos a un castigo lúgubre y espeluznante. En esta misma categoría también podría estar la historia de “Amelia” de la “Trilogía de Horror” (1975) Dir. Dan Curtis, donde el mal aparece casualmente cuando una joven soltera se encuentra en conflicto de comenzar su vida sexual, contraponiéndose al comportamiento moral que su madre espera en ella, todo parece como si algo primitivo saliera de su interior personificado por un ente externo.
En la línea de referentes donde los objetos fetiches son evidencias de la transgresión a la vida humana, estaría la subestimada pero innovadora “Chucky, El Muñeco Diabólico” (1988) Dir. Tom Holland, donde magia negra, slash y gore, se conjugan con una buena historia y narran la situación desafortunada (que le pudo haber pasado a cualquiera) de una madre soltera, trabajadora y de su pequeño hijo Andy. “Puppet Master” (1989) Dir. David Schmoeller, es una película con una historia original y entretenida, donde la premonición de haber encontrado una pista sobre la leyenda de los 30’s de unas marionetas diabólicas y su maestro, es finalmente revelada por un grupo de amigos psíquicos.
En la misma línea argumental se sostiene la película de clase B “Dolly Dearest” (1990) Dir. Maria Lease, donde una maldición ancestral escapa de una tumba para introducirse en una muñeca, y poseer la voluntad de una pequeña niña. Una historia parecida ocurre en el episodio “Chinga” (1998) de X files dirigido por Kim Manners, cuando una infanta se ve poseída por una muñeca, situación que iguala al comportamiento de una niña mal educada, berrinchuda y manipuladora de sus padres. La posesión de una muñeca para ejercer daño es consistente en los ejemplos anteriores, pero la muñeca como instrumento de posesión a otros, es de igual manera perturbador; y su ejemplo está en la segunda temporada de “Penny Dreadful” (2014), donde una bruja utiliza a una muñeca como una herramienta macabra de control.
El punto más importante de estos referentes es que todas las anteriores películas tienen una historia sólida y emocionante, lo que hace tremendamente inesperado e incomprensible, por qué se sigue viendo películas de tan baja calidad y lejos del nivel argumental e innovador de los orígenes del subgénero en los 60’s y 80’s, incluyendo también la película decepcionante película “Robert” (2015) Dir. Andrew Jones. Las mismas leyendas urbanas basadas en historias reales ya sea la muñeca poseída descubierta y confinada por los Warren, o la historia de “Peggy the doll” y Robert el muñeco espeluznante (min 26) presentados en el reality show “Deadly Possessions” (2016) y en el programa “Mystery Museums” (2010), son todavía más escalofriantes que el filme de John R. Leonetti.
James Wan como productor del filme y creador del concepto de Annabelle, se ha defendido de las críticas y comparaciones, diciendo por un lado que la secuela de Annabelle será mucho mejor que la primera, y que su intención no era crear un filme gore sino más bien cercano a la línea del thriller psicológico sobre muñecos ventrílocuos. Sin embargo la producción que nos ocupa obviamente no están a la altura de la obra maestra extraordinaria “Death of night” (1945) Dir. Alberto Cavalcanti y otros directores, ni del episodio de “la dimensión desconocida” “The dummy” (1962) Dir. Abner Biberman, o de “Magic” (1978) Dir. Richard Attenborough, ni siquiera de su bien logrado filme “Dead Silence” (1997) Dir. James Wan. La temática de estos filmes circula en la pregunta sobre ¿quién controla a quién? y donde los humanos terminan siendo marionetas de sus propios muñecos.
Tener a la muñeca inerte, era nuestra filosofía… no hago películas de muñecas asesinas, no sé si las personas entienden la diferencia entre un thriller psicológico sobre un muñeco ventrílocuo y cine de muñecos asesinos. Soy fan de Chucky pero no creo que Annabelle viva en ese mundo, vive mucho mejor entre el thriller psicológico del muñeco ventrílocuo. Definitivamente en la creación de Annabelle para “El Conjuro” tome inicialmente el concepto de la muñeca de la cual se basa la historia, y la conceptualice a mi manera… yo tenía un afecto por esos muñecos, y en eso se convirtió Annabelle… Lo que hace espeluznante a un muñeco ventrílocuo no es que te persiga con un cuchillo, sino el hecho de que estando sentado, alucinas que te está viendo. – James Wan
Si James Wan quería producir un thriller psicológico de ventrílocuo, no lo logró. Annabelle parece una versión absurda y risible del Bebé de Rosemary de Polansky y Vacaciones del terror de Cardona.
El episodio del reality show Deadfiles “Death dolls” (2011) sobre una mujer coleccionista de centenares de muñecas inertes las cuales jamás se mueven, en un nivel subjetivo, farsa o no es todavía más efectivo terroríficamente que lo que vimos en el 2014. Se espera que James Wan y sus nuevas producciones hayan aprendido la lección, pues aún muy a pesar de este tropiezo, no se duda sigue siendo uno de los directores y productor más interesante y talentosos del cine de terror comercial del momento.
Recomendación 3