Escapamos a trasluz de sueños blancos

de vapores perfumados,

bebimos completa la espuma rabia

de no estar despiertos;

mas el sol se nos coló en volutas

e incendió las cama cuna.

Despertamos.

 

Sé que dimos el salto mortal

que brincamos del abismo

al adiós del temporal,

al arribo de los lagos

lienzos

hojas

que sostienen nuestros yoes.

 

Dimos paz a la marea

miel azul

néctar ritual,

danza de peces finos

con escamas vítreas de alquitrán.

 

Y si no hay ritual sin sacrificio,

ofrendemos pues las bestias

y vistámonos de dioses.